Así andamos, rompiendo esquemas...¡mis esquemas! Y en principio sería para bien, porque las noticias que me descolocan son buenas, pero entonces, ¿contra qué lucho? ¿a qué debo atenerme?

Y es que el Jueves fuímos a la visita de mi marido con el andrólogo para conocer los resultados del FISH y la fragmentación del ADN espermático que le solicitó él mismo hará cuestión de 3 semanas.
Creo, sin ser mal pensada, que éramos su única visita de esa tarde, o de las pocas programadas; nos cogió de inmediato y no estuvimos dentro más de 30 minutos.

Se le veía contento, especialmente cuando a la pregunta de mi marido sobre si "había aprobado el examen" su cara dibujó una sonrisa triunfal acompañada de un "sí, y con nota".

Supongo que ganar el pique profesional que le llevó a pedirnos una nueva fragmentación (¡dispensándonos de abonarla!) era su mayor recompensa, su "os lo dije que no podía ser él (mi marido)" de una forma indirecta.
Hay que reconocer que el FISH saliera normal me alivió pero que muchísimo, no tanto el resultado de la fragmentación: 2% de fragmentados con SÓLO 12h de abstinencia. Y seguro que estáis pensando que es un resultado bueníiisimo, ¡y lo es! ¿por qué no me ha quitado un peso de encima? Pues muy simple, porque me ha dejado sin una causa a la que achacar tooodos nuestros abortos.

 

No quita, de todas formas, que ahora ya sabemos que contra más abstinencia de mi marido más "tontos" o "rotos" salen sus bichos, hablando las cosas claras; ¿puede que fuera esta la causa aunque ahora salga así de maravilloso todo? Y porque no... Por desgracia, el cansancio del día a día aprieta más de lo que nos gustaría y podría haberse dado la fatalidad en alguno de los tres (o en varios) que cogiéramos una partida "mala" después de días de celibato.

 

Lo que sé es que ahora tengo a mi marido con el humor subido, más animoso y aliviado de no ser el "la causa", y me alegro por él porque también me beneficia a mi..., pero entonces ¿dónde debo buscar? Ni tan siquiera mi visita al día siguiente tuvo la respuesta, más bien todo lo contrario, pero para eso ya dedicaré la siguiente entrada.

 

¿Nuestras conclusión?

- La fragmentación tras 5 días era elevadísima, debemos tenerlo en cuenta porque no sería descartable como causa, aunque su propia oscilación la convierte en un parámetro poco fiable desde el punto de vista de los médicos.

- La abstinencia antes de la búsqueda natural de un embarazo nos puede resultar más que perjudicial y, sobretodo, su mejoría no requiere de tratamientos complementarios tal y como nos habían dicho, si bien mi marido está totalmente comprometido con la causa y de momento lo tomará todo como se había estipulado al principio.