Contra más tiempo pasa, más años voy cumpliendo y más me paro a "estudiar" los pequeños detalles que van aconteciendo MENOS CREO EN LAS CASUALIDADES, por demasiadas que llegan a haber cuando una se para a pensar.

Hoy tomé consciencia de otra más de tantas, y no fue tras ningún proceso de meditación trascendental ni nada por el estilo; esta menstruación, la última antes de retomar nuestra "aventura", justo vino el mismo día, 17 de Diciembre aunque apurando las horas que le quedaban, que hice mi primer test de embarazo 2 años atrás y supe que estaba embarazada por primera vez en mi vida.
¿Creéis en eso de cerrar etapas, círculos o similares? Yo cada vez más.

Como he dicho, mis últimos años han estado llenitos de cosas que te hacen pensar, algunas incluso las he compartido con vosotras en entradas al blog (Bromas de mal gusto I y II), y es que el calendario tiene 365 días, así que ya es muuucha "casualidad" que ciertas cosas se den en un momento taaan clave para una misma.
El pistoletazo de nuestra decadencia personal coincide con el inicio de una nueva etapa que, aunque pueda acabar igual de mal, viene después de un laaargo recorrido que marca un antes y un después a todos los niveles, no solamente en el plano estrictamente médico.

 

Decisiones que tomas o cosas que se hacen sin parar a pensar la fecha en la que se está pero que descubres a posteriori que tienen un nexo con el pasado más reciente; otras que se reciben o vienen dadas de fuera y más allá de la coincidencia de calendario además están cargadas de significado para su receptor, en este caso yo.

Probablemente penséis que estoy to'crazy pero la suma de pequeñas cosas ya empieza a tomar un volumen que se hace ver sin necesidad de querer buscar tres pies al gato.