Hoy, será efecto de la progesterona o porque soy así de "fábrica", me he levantado gruñona, y supongo que la cosecha de TE negativos no ha sido de mucha ayuda aún ser su valor algo prematuro como para tomarlos por definitivos.

Y es que de las últimas llamadas que he recibido de mi madre 3 han acabado con la fatídica pregunta de si ya estaba embarazada. Entiendo que detrás de la misma haya preocupación por mi, por cómo pueda ir todo, a diferencia de cuando lo preguntan pacientes o conocidos que están al corriente de lo nuestro, movidos por la curiosidad malsana en su mayor parte, pero me agobia más que otra cosa, me hace sentir fiscalizada, interrogada.
Por el momento no ha hecho falta mentir: NO, NO LO ESTOY. Pero no sé como hacerle entender, porque ya lo he intentado, que cuando llegue el embarazo seremos nosotros quienes decidamos el cuando y el cómo lo decimos.
Siempre me responde que "soy tu madre y además tu padre es médico..." Cierto, pero precisamente porque voy chutada y llevo en la frente el San Benito de "embarazo de riesgo" sé cuando debo ir a los médicoS que me llevan, y la "s" mayúscula no es un error es para recalcar que me van a llevar: inmunólogo, ginecóloga de la mútua y equipo de embarazos de riesgo de La Maternidad. ¿Cuánta gente más hace falta?
Si llega el momento y va mal LO SABRÁN, que no sufra por eso que si lo que quiere es correr tras de mi lo va a hacer, ¿a caso no hemos recurrido a ellos las 3 veces anteriores...?
Pero, si los astros se alinean, y conseguimos sacar un embarazo adelante, quisiera poder dar la sorpresa a los míos, hacerlo bonito, ¡como lo he visto en taaantas imágenes y montajes que circulan por internet y he imaginado muchísimas veces más!
Y sobretodo, sobretodo, decirlo en el momento que tengamos suficiente tranquilidad, la semana que sea pero que hayamos pasado los momentos más delicados sin presión externa, pues ya suficiente de los nervios estaremos -afectando inevitablemente a la relación- como para que, desde fuera la gente, aunque sé que con la mejor intención del mundo, diga la suya, opine y quiera intervenir en cosas de dos.

Habrá quién estará encantada de tener a su madre al lado en todo el proceso, pero ¿a toooda la familia también? Que en mi casa las noticias vuelan como la polvora.
Puedo entender todos los argumentos que me digáis a favor de mi madre, mi familia, yo también los puedo ver pero hay momentos que soy más partidaria de las tácticas animales: que me dejen solita y ya les avisaré si hay novedades.
Llevo demasiado tiempo esperando ser madre, soñando en tooodos y cada uno de sus momentos, sus etapas, y por eso, porque ya habrán cosas que desmonten taaantos esquemas mentales, quiero tener algo de privacidad y ser dueña de unos momentos que no se nunca si llegarán.

Hasta hace bien poco hacía aquello que sabía se esperaba de mi, dicho de otro modo lo que los otros querían, y sé que si llega alguna vez EL EMBARAZO, tooodo el mundo opinará, aleccionará y sabrá hacer las cosas mejor que yo con un "tú misma" o un "te lo dije" en la recámara. Creo que a punto de cumplir 32 años tengo derecho a tener mis propios criterios y a que estos sean respetados, porque quizá serán distintos pero no por eso implica que peores.

Y aclarar una cosa: dejar a nuestro entorno al margen en estos momentos implica, por descontado, mejores amigos y amistades de toda la vida. Esta aventura es cosa de dos.